Alfredo Padilla
La Presidenta Municipal de Tepic, Geraldine Ponce Méndez, presentó los últimos días a representantes de medios de comunicación el proyecto de la ’Ciudad de las Artes Indígenas’ (que se concatena con el del ’Andador Tepic Río’ y ’La Plaza del Músico’), el cual corresponde a una gestión alcanzada ante el Gobierno Federal a través de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (SEDATU), que dirige Román Meyer Falcón (https://www.gob.mx/sedatu/prensa/creara-sedatu-ciudad-de-las-artes-indigenas-en-tepic ), mismo que, según se anunció, tendrá una inversión de 400 millones de pesos y será ejecutado en un plazo de 180 días.
En la conferencia, la Alcaldesa dio a conocer asimismo como una de las características más importantes que tendrá el proyecto, el impulso y conexión con Pueblos Originarios, marco en el que, seguramente se garantizará que su voz no solo sea escuchada, sino que constituirá base esencial para la creación de estrategias y líneas de acción conjuntas: Federación, Estado y municipios que conlleven a mayores oportunidades de desarrollo y justicia.
La Ciudad de las Artes Indígenas, al contar entonces con un oportuno respaldo del gobierno federal - derivado del compromiso y los planes consecuentes del presidente Andrés Manuel López Obrador con los pueblos originarios- refuerza a Nayarit como una Entidad de gran peso en la cultura, identidad, unidad y progreso del pueblo de México; de tal suerte que será ahora el desafío, mantenerse a la altura y a la vanguardia de dicha demanda histórica.
Con lo anterior pues como esencia de la meta de saldar una deuda añeja con la cultura originaria, la Ciudad de las Artes Indígenas, la Plaza del Músico y el Paseo Tepic-Río, al igual que el saneamiento de las aguas del propio afluente Mololoa, iniciará ya este mes de febrero.
El complejo cultural, se contempla sea un espacio importante para la confluencia fecunda de los cuatro pueblos originarios de nuestro estado: ’na’áyeri, wixárika, o’dam y meshikan’. Solo queda esperar que todo empiece sin complicación alguna, y con el genuino sentir de los beneficiarios directos, de cara al comienzo de una nueva historia de solidaridad, unidad y justicia social.
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